THREE ISOLATED BEDS
La instalación está compuesta por tres estructuras metálicas que sostienen espacios aislados de distintas dimensiones, los cuales se comunican entre sí a través del vidrio de las ventanas. La instalación parte de mi interés por reformular el proceso del dibujo como una arquitectura simbólica; es decir, observar la transformación de un plano que, desde su naturaleza física, posee tanto cualidades asimétricas como tridimensionales. Me interesa la representación de la “asimetría” reflejada en las piezas, así como la idea de “lo imperfecto” dentro de sus implicaciones conceptuales. La “cama” funciona aquí como un arquetipo que nos habla de la residencia del encierro íntimo y, por lo tanto, de un espacio heterogéneo: no existe la cama perfecta, así como no existe un solo tipo de cama. Las camas son lugares donde conviven los sueños y las pesadillas. A la par de esto, estas esculturas arquitectónicas representan espacios de descanso, de modo que, dentro de un contexto político como el del arte, “no hacer nada” se convierte en una posición política y, por ende, paradójica. La paradoja también es asimétrica.
The installation comprises three metal structures that uphold isolated spacesof different dimensions,which communicate with each other through the glass of windows.The installation departs from my interest in reformulating the process of drawing as a symbolic architecture.
That is, observing the transformation of a plane that, from the point of view of physical nature, has both asymmetric and three-dimensional feature . I am interested in the representation of the "asymmetry" reflected in the pieces as well as the idea that amounts to "the imperfect" within its conceptual implications. The “bed” as an archetype that tells us about the residence of intimate enclosure and, therefore,about a heterogeneous space: there is no perfect bed, just as there's not only one type of bed. Beds are a place where dreams and nightmares coexist. Along with this, these architectural sculptures also represent places for resting, so that within a political context, such as art, "doing nothing" becomes a political and, therefore, a paradoxical position. The paradox is also asymmetric.









